¿Qué es el herpes simple tipo 1?
El herpes simple tipo 1 (HSV-1) es una infección viral muy común que afecta principalmente la zona de los labios y la boca. Se manifiesta con pequeñas ampollas o úlceras dolorosas conocidas como “fuegos labiales” o “herpes labial”. Aunque puede desaparecer por sí solo, el virus permanece en el cuerpo de manera latente y puede reactivarse en ciertos momentos.
Se estima que más del 60 por ciento de la población mundial es portadora del virus, aunque no todas las personas presentan síntomas. El HSV-1 se transmite principalmente a través del contacto directo con la piel o la saliva de una persona infectada, especialmente durante un brote activo.
Causas y factores desencadenantes del herpes simple tipo 1
El herpes labial puede reactivarse en momentos de debilidad del sistema inmunológico. Algunas de las principales causas de brotes son:
- Estrés físico o emocional.
- Exposición prolongada al sol o cambios bruscos de temperatura.
- Enfermedades o infecciones que debiliten el sistema inmunológico.
- Fatiga extrema o falta de descanso.
- Cambios hormonales, como los que ocurren durante la menstruación.
- Contacto directo con una persona infectada a través de besos, utensilios compartidos o cosméticos contaminados.
Síntomas del herpes simple tipo 1
El herpes labial pasa por diferentes etapas desde su aparición hasta su curación completa.
- Hormigueo y ardor: Se siente una ligera picazón o cosquilleo en la zona afectada antes de que aparezcan las ampollas.
- Formación de ampollas: Pequeñas vesículas llenas de líquido aparecen alrededor de los labios o en la boca.
- Rotura y formación de costra: Las ampollas se rompen, liberando líquido y formando costras que sanan en unos días.
- Curación: En la mayoría de los casos, el brote desaparece entre 7 y 10 días sin dejar cicatrices.

Tratamientos y recomendaciones
Aunque el herpes labial no tiene cura definitiva, existen tratamientos que ayudan a aliviar los síntomas y reducir la duración del brote.
- Antivirales tópicos y orales: Medicamentos como aciclovir o valaciclovir pueden acortar la duración del brote si se inician a tiempo.
- Cremas y geles calmantes: Ayudan a reducir la irritación y el dolor.
- Evitar el contacto con la lesión: No tocar ni reventar las ampollas para prevenir la propagación del virus.
- Mantener una buena higiene: Lavar las manos con frecuencia y evitar compartir objetos personales.
- Protegerse del sol: Usar bálsamos labiales con protector solar para evitar la reactivación del virus.
¿Cuándo acudir al dermatólogo?
Si los brotes de herpes labial son muy frecuentes, duran más de dos semanas o afectan gravemente la calidad de vida, es recomendable acudir a un especialista. Un dermatólogo puede evaluar tu caso y recomendar tratamientos personalizados para reducir la recurrencia y controlar los síntomas.
Si necesitas orientación o un tratamiento especializado para el herpes simple tipo 1, agenda una consulta con la Dra. Lorena Villa.